Castro de Penalba y Pedra da Serpe
Considerado como uno de los castros más antiguos de Galicia (VIII – VII la. C.), el Castro de Penalba está situado en el alto del monte en una colina granítica de 423 metros de altitud.
Consta de dos terrazas. La inferior estaá circundada por una muralla de piedra que tenía como funcionalidad, además de la defensiva, la de contener la tierra para permitir el asentamento. En la superior encontramos la ermita , donde se celebra la tradicional romería de Santo Antoniño de Penalba, y la conocida Pedra da Serpe.
La Pedra da Serpe se sitúa en la cumbre del castro de Penalba, sobre una gran losa granítica, desde donde se pode ver una gran panorámica de las tierras del río Lérez. La roca está orientada hacia oriente y se inclina unos 80º. En ella se representa una forma de serpiente de gran tamaño, aproximadamente 2 metros, aunque hay expertos que postulan que se muestran dos serpientes en el momento del apareamiento.
La serpiente es un motivo muy representado en el arte gallego, y esta es una de sus representaciones más antiguas. El Grupo Galaico de Arte Rupestre está datado entre el tránsito III-II milenio a. de C. pero este grabado se realizaría en los primeros momentos de la cultura castrense, en torno a los s. VIII-VII a. de C., como parte integrante de ese depósito castrense.
Incluso que otros yacimentos arqueológicos gallegos, esta inscultura también posee folclore: «Los matrimonios sin hijos que quieran tener descendencia deben de ir la noche de San Juan a copular sobre la piedra llevando, como ofrenda, una taza de leche para que beban las cobras». En la tradición las serpientes eran seres mágicos y la leyenda es una manifestación en la que la sociedad tradicional mostraba su ideología en clave simbólica.